La llegada de la novia a las puertas de la iglesia o del ayuntamiento es una de las cosas que aguardan los invitados con más curiosidad. De un tiempo aquí, se ha puesto de moda el llegar de una manera muy original. Ya no vale bajar del Renault de tu padre. Hay que aprovechar y hacer la aparición en un auto que normalmente no encontraríamos en el ambiente que nos rodea.
Según el protocolo, el coche ha de ser sobrio y de colores discretos como el blanco, el beige o el gris, pero muy poca gente respeta estas directrices porque a fin de cuentas una se casa para toda la vida. Muchas novias eligen la calesa. Un coche de caballos siempre es una buena elección, sobre todo en días soleados y de calor. Radiante va la novia, tirada por caballos. Pero si a ti lo que te gusta es el motor, no dejes de echar un vistazo a los coches clásicos y elegantes como el Rolls Royce o el típico taxi inglés, el Austin Cab. Una gran elección que hará las delicias de las novias más clásicas. Otro de los vehículos que se ha puesto de moda es la limusina o ya más espectacular, la limusina Hummer H2. Hay que tener en cuenta el recorrido desde casa de la novia al lugar donde se celebre el enlace ya que uno de los inconvenientes de estos coches es su longitud.
Elijas el coche que elijas seguro que es un acierto ya que hay que pensar que los invitados están a la espera de la novia y que llegue como llegue será un éxito.
Fuente: Terra.es
