Hoy les traigo una propuesta de maquillaje muy dulce y romántico, pensado para aquellas novias que desean llegar a la ceremonia del brazo del padrino, envuelta en un bello vestido color blanco.
Como verán, la propuesta es para aquellas novias que aun conservan la tradición de la boda, la magia del romance y la ternura del sueño cumplido.
Por comenzar, el cutis debe estar impecablemente lavado y acondicionado. Sobre el mismo se aplicará una base en un tono muy similar al color de piel de la novia (ya que esta propuesta es acorde a cualquier tipo de piel).
Una vez realizado esto, se sugiere proteger los pómulos con algodón o gasa, evitando de esta manera que se ensucien con restos de sombra de ojos. Para poder pintar correctamente los párpados, un primer paso es realizar un delineado sumamente fino en toda su extensión, con un delineador de lápiz, que no sea líquido. Una vez cumplido este paso, se deberá aplicar una sombra de base, la cual se sugiere sea la misma que se aplique para dar luz a la mirada. Ésta puede ser en tonos blancos o dorados.
En la profundidad del ojo, se aplicará sombra rosa fuerte y en el párpado móvil, un rosa más suave. Finalizado esto, se volverá a delinear el ojo y se sumará la máscara para pestañas negra. En caso de no tener abundantes pestañas, una buena opción son las postizas.
Finalmente, los labios deben ser maquillados en n rosa medio, y sobre él se colocará brillo translúcido.
