La boda consta de dos partes, las cuales son las más importantes, la ceremonia y el banquete, y para tener un banquete perfecto debemos elegir el menú ideal. Debemos tenerlo muy en cuenta durante toda la preparación de la boda.
En lo primero que tenemos que pensar es en nuestros invitados, como es lógico queremos que se lo pasen genial y que coman mejor. Si vas a celebrar una boda muy íntima en la que va a haber pocos invitados puedes tenerlos muy en cuenta a la hora de hacer el menú, acércate a sus gustos e intenta complacer a todo el mundo. Si a tu banquete van a acudir muchas personas, lo ideal es que hagas un menú muy generalizado, porque será muy difícil que todo el mundo esté contento con el menú, también puedes dar opción a varios platos para que puedan elegir.
Lo siguiente que tenemos que tener en cuenta es si va a ser comida o cena. Si tu boda es de día, y por lo tanto, se hace comida, puedes dar un pequeño aperitivo antes de la comida, para ir abriendo boca. El menú se desglosará en primer plato o entrantes, segundo plato, postre y café o té. En el primer plato pon algo que sea ligero y en el segundo da opción a elegir entre carne o pescado. Elige unos buenos vinos, blanco o rosado para la carne o el pescado. Da opción a elegir entre café, té o infusiones.
Si tu boda es de noche, y por lo tanto se hace cena, pon entrantes en vez de primer plato, para que sea más ligero. Al igual que en la comida puedes hacer un pequeño lunch antes de la cena.
El menú de la boda es muy importante, así que eligelo bien para que el banquete sea perfecto y tus invitados se queden encantados.
