Organizar una boda es algo que puede convertirse en verdaderamente estresante, lo mejor es tomarse las cosas cosas con humor y pensar que todas las actividades que se hagan serán para que la fiesta resulte exitosa. Hoy te daremos algunos consejos para que se puedan evitar las peleas mientras planificas tu boda.
1 – Planificación de una boda

Planificar una boda puede ser estresante, ya que obliga a los miembros de la pareja a realizar diferentes actividades además de las que ya se realiza en la vida cotidiana, además de que la pareja tiene que llegar a un acuerdo en base a los gustos de ambos, en ocasiones deben ceder en la negociación.
Es fundamental no caer en las peleas ya que el momento de los preparativos es único y nunca se volverá a vivir. Es una forma en que los miembros de la pareja pueden aprender mucho del otro, observar como se comportan frente a los desafíos que se van presentando día a día
2 – Compartan sus expectativas

Antes de comenzar la planificación de la boda en sí misma es necesario que los miembros de la pareja se sienten y dialoguen acerca del nivel de participación que cada uno tendrá en ese proceso. Seguramente no será necesario que los dos se ocupen de todo, pudiendo dividir las actividades. En este punto es fundamental saber delegar y respetar los gustos y deseos de la otra persona. Quizás uno quiera dedicarse a la búsqueda de la música mientras que la otra persona se puede ocupar de los souvenirs.
De esta manera, poniendo en claro los deseos de cada uno, no se desilucionarán ni sentirán que su pareja no llega a cumplir las expectativa. Piensa siempre que gran parte del éxito de una pareja se basa en el diálogo.
3 – Establece un presupuesto

Otra conversación que debe tener la pareja en el momento de planificar una boda es acerca del presupuesto. Tener este punto en claro evitará la aparición de conflictos. Es importante que cada uno habla, de manera sincera, acerca de las situaciones financieras individuales.
Establece un presupuesto que sea realista antes de contratar ningún servicio, así se evitará que se acumulen y tomen deudas innecesarias.
4 – Ten presente los gustos personales

Para planificar una boda es necesario tener en cuenta los gustos personales, las preferencias y lo que realmente les provoca rechazo. Si la pareja no está de acuerdo en algún aspecto se deberá dar un paso atrás con la decisión y volver a buscar considerar lo que ese servicio o elemento significa para uno de los miembros de la pareja.
No se deberá tener miedo de hablar acerca de lo que es importante. Por lo general uno llega al momento de planificar una boda con sueños que se fueron formando y forjando a través de los años, si bien es necesario llegar a un equilibrio y a una negociación tampoco se debe renunciar a todos los deseos, sino no se llegará a la vida plenamente y con mucha felicidad.
En el momento de hablar de las preferencias se tiene que hacer en el momento y en el ámbito correcto, pensando en una opción racional. Por ejemplo, pelear delante del proveedor de flores no será una buena idea, ni un momento agradable para el proveedor. Antes de ir a contratar un servicio los miembros de la pareja ya deberán estar de acuerdo.
5 – Divide las tareas

Hay un dicho que dice ‘divide y reinarás’, en este caso cae como anillo al dedo. Como te dijimos anteriormente una buena alternativa es dividir las tareas dentro de la organización. Eso si, se tiene que respetar los gustos de la otra persona. La clave en este punto es tenerle confianza a la pareja. Ten en cuenta que a la hora de la elección se puede cometer un error, pero eso no tiene que generar un conflicto, todos somos humanos y nos podemos equivocar. Si el error se puede reparar mucho mejor, pero si no es reparable no debe generar un malestar que continúe hasta el momento de la boda.
6 – Aprender a ver las cosas racionalmente

A medida se acerque la boda los aspectos de la planificación requerirán más tiempo. En este punto es necesario calmarse, la pareja no solo debería ocuparse de la planificación de la boda, lo ideal es que también se dediquen el tiempo necesario para divertirse, salir a pasear, conocerse aún más. La organización de este evento no tiene porque convertirse en el tema excluyente, sino, al pasar la celebración, sentirán que ha quedado un vació, que no saben a que dedicar el tiempo libre.
7 – No tomar todo por sentado

Cuando te encuentras en plena planificación de la boda no deberás perder la perspectiva de lo que quieres y de lo que imaginas. Por eso, te aconsejamos antes de empezar con la vorágine anotar todo en un cuaderno y las fechas en que se deberá realizar cada una de las actividades, contrataciones o averiguaciones.