Despertadores para los más dormilones

Para marmotas, mas bien. Todos odiamos ese ruido horroroso que presagia el final de una noche y que nos devuelve a la cruda realidad: hay que levantarse, ir a trabajar, a estudiar, a lo que sea… y el despertador nos avisa de ello. Pero hay algunos a los que les cuesta más que a otros despegarse de las sábanas. Para todos ellos están hechos estos despertadores, máquinas infernales de tortura matutina inventadas por alguien muy macabro.

El despertador puzzle suena, lanza las piezas que están sobre él y hasta que no vuelvan a estar todas encajadas, no deja de sonar. Vamos, el remedio ideal cuando te despiertas con los ojos pegados y alergia a la luz: ponerte a buscar piececitas por toda la habitación. Su precio es de 65 euros.

despertador

Clocky es un despertador que suena, corre y se esconde para que no lo puedas apagar y tengas que levantarte por obligación. No obstante Clocky es muy sabio y te da la oportunidad de levantarte como una persona normal, sonando en la mesilla de noche.

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El problema es que si no te despiertas salta y empieza a correr como un loco por toda la habitación y sonando sin parar hasta que encuentra un lugar donde esconderse y seguir torturándote desde allí, hasta que consigas encontrarlo y desactivarlo. Para entonces ya te has recorrido media casa, estas bastante despierto, sudando y listo para darte una ducha y salir de casa. ¿Merecerá la pena pagar 58 euros?

 


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