Para una piel radiante, está demostrado que la mejor crema que podemos utilizar es nuestra dieta. Obtener de forma natural a través de los alimentos una piel radiante.
Aportar diariamente una dosis de vitaminas para nuestra piel hará que luzcamos un rostro terso, firme, luminoso y limpio. La Vitamina C es la protagonista y responsable de que nuestra piel luzca un color natural. Podemos verla presente en muchos cosméticos pero realmente hará su verdadero efecto consumiendo este tipo de vitamina. Encontraremos vitamina C en frutas como los kiwis, las naranjas, las frutas del bosque y las fresas.
Los betacarotenos, una vitamina que se convierte en Vitamina A una vez los ingerimos. Los encontraremos en las zanahorias, tomates, calabazas, acelgas… Un anti-age más natural que ninguno. También habremos oído que la zanahoria es buena para el bronceado y es que, otorga un color bonito a nuestra piel. Además, evita el acné.
Vitaminas B y E se encuentran presentes en las legumbres, los aguacates o los cereales integrales. El aliado perfecto para lucir una piel sana, un bonito cabello y unas uñas fuertes. Actúan como antioxidantes y nos fortalecen para tener una mayor energía.
No basta con desearlo, tenemos que ponerlo en práctica. Para poder presumir de una piel cuidada debemos cuidar nuestra alimentación y llenarla de vitaminas y frutas que día a día enriquecen nuestro organismo. No debemos olvidar que debemos ingerir al menos 5 piezas de fruta al día, mejorará nuestra salud y convertirá nuestra piel en una tez luminosa y tersa.
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