Cuando hablamos de una piñata, seguramente pienses en las fiestas de cumpleaños infantiles, pero déjame decirte que este divertido implemento cada vez se hace más común en las bodas, y no solo para entretener a los pequeños que asistan al banquete, sino que también para diversión de todos los adultos.
Pero lo mejor de todo es que las piñatas para bodas suelen constituir un momento ideal para amenizar toda la fiesta, relajar tensiones y disfrutar de ese momento lleno de felicidad.
Por ello mismo, aquí te comentamos algunas ideas para que tengas en cuenta a la hora de implementar una piñata en tu banquete de bodas.
En primer lugar, debes escoger qué tipo de piñata utilizarás y su decoración. Pero esto no es ningún problema, ya que existen tantos diseños como puedas imaginar, o hasta encargar uno de tu propia creación.
Además, las empresas encargadas del cotillón ya cuentan con piñatas especializadas para bodas, con divertidas formas de pasteles de bodas, de los novios o de corazones. ¡Solo debes escoger!
En cuanto al relleno, éste dependerá de si la piñata está dirigida a los niños de la fiesta, a los adultos o si es para ambos. En mi opinión, lo mejor es destinar una piñata para cada grupo, realizando una típica piñata infantil para los más pequeños, mientras que te reservas una piñata para los adultos, la cual puedes rellenar con algunos elementos divertidos, como ligueros, ropa interior sensual o hasta juguetes eróticos, pero esto dependerá del público de tu boda, y de tu propio humor.
Mientras que el momento de romper la piñata de bodas es de los más divertidos. Por supuesto que pueden participar los padrinos y las damas de honor, pero siempre resulta muy jocoso que sea la propia novia la que rompa la piñata, mientras el novio la sujeta y mueve mediante un piolín.
¡Anímate! Seguramente causarás sensación en tu banquete con una piñata de bodas.
Imagen: bodacor
